“Banfield es como un amigo, como un maestro” Así arranca, sentenciando Marcelo Krebs que es el Taladro para él. Una definición que a pocos tal vez se nos hubiese ocurrido: Un club maestro, que nos enseña a vivir, a alegrarnos, a apenarnos y a sentir amor. Esta idea sólo podía salir de un banfileño apasionado.
Marcelo Enrique Krebs es Ingeniero Civil y Licenciado en Análisis de Sistemas de la Universidad de Buenos Aires. Tiene 46 años y vive hace seis años en México trabajando como Country Manager para una empresa argentina radicada en ese país. “Siempre trabajé en sistemas relacionado con Bancos y tengo un Doctorado en Ciencias de al Administración en la Universidad de Belgrano” cuenta orgulloso de un impresionante currículum y perfil profesional. Casado con Gabriela hace 18 años y padre cuatro hijos: Martín (15), Diana (13), Federico (11) y Benjamin (1), integrantes de una familia hasta donde las mascotas son del Taladro. Así, Marcelo es el autor del libro “Vida apasionada de un banfileño”, otro de los libros que se suma a la ya extensa colección banfileña y que repasamos en esta nota realizada a la distancia.
¿Como fue tu acercamiento a la literatura?
Siempre me gustó leer, principalmente los clásicos. Tenía una biblioteca en mi casa con unos 300 libros, y me los leí casi todos. Escribí algunos cuentos, después mi tesis de música y algunos apuntes y libros cuando daba clase de programación y de desarrollo de proyectos. Siempre me gustó escribir, de hecho escribí mucho tiempo en páginas de fútbol, relatos de viajes y estoy escribiendo unos libros de religión.
¿Cómo surgió escribir un libro?
Una amiga de mi señora dijo que no entendía como una persona educada como yo, que hablaba varios idiomas, que había estudiado dos carreras y que tenía postgrados podía apasionarse tanto por un simple partido de fútbol, y adorar tanto a Banfield. Entonces traté de explicarle que no era solo un partido, que era una vida que uno llevaba junto a su equipo y traté de contarle algunas anécdotas. A la noche seguí repasando anécdotas y después escribí los títulos. En un momento tenía todo esbozado para escribir el libro, y la introducción y el primer capítulo. Se lo mostré a un persona que se llama Víctor Raffo, que escribió unos libros de Banfield. A él le gustó, y me dio ánimos para seguir. Me llevó más de dos años, pero solo al final le dediqué mucho tiempo, ya que al principio escribía esporádicamente.
¿Y que te inspiró para hacerlo?¿Alguna influencia en el arte?
No tengo ninguna influencia en realidad. Lo mío es muy intuitivo. Yo escribo como me salen las palabras. Es más, corrijo muy poco, casi como que lo que escribo por primera vez es lo que dejo como definitivo. Mi señora es la que corrige el estilo.
¿Como es vivir la vida Banfield para vos?
Banfield es sin duda una de mis pasiones. Es como un amigo y un maestro. Cuántas tristezas y cuántas alegrías me dio en mi vida. Podría hacer otro libro con más anécdotas si quisiera. Pero creo que para mí lo más importante es que pude aprender muchas cosas con mi equipo. Pude entender cómo sacar lo positivo de una derrota, el aprendizaje de un fracaso, aprender a ser humilde, a valorar las victorias y sin duda a hacer las cosas desde abajo. No importa cuán lejos puede estar un objetivo, Banfield me enseñó que tenía que esforzarme, trabajar en equipo, dedicarme mucho para competir contra los que tenían más medios, o más apoyo que yo. Y que si era paciente en algún momento iba a cumplirlo.
Desde chico viví lejos de la cancha de Banfield, siempre fui un espécimen raro en ese sentido. Siempre me pareció como que era un embajador de Banfield en ese sentido. Pero creo que todas las personas que me conocen, saben que no sería yo sin mi equipo, como que no puedo separarme de él.
¿Qué nos podes contar de “Vida apasionada…”?
Es un libro de anécdotas e historias del Club. No se vende por internet ni en librerías, lo hice para las personas que realmente se interesaran por él, no para ganar dinero. Mi madre tiene unos ejemplares en Argentina y yo tengo algunos en México. Si me mandan un mail podemos ver como enviarlo.