La
pelota dejó de girar el 17 de marzo, exactamente 6 meses sin competencia
oficial. Los planteles de primera división retomaron sus trabajos, por la
presión de aquellos clubes que deben disputar la Copa Libertadores (River, Boca,
Racing, Tigre y Defensa y Justicia). El próximo jueves, ellos tendrán competencia
oficial, y estaba programado que una semana después, el torneo doméstico
también dé su puntapié inicial. Sin embargo, debido a la gran cantidad de casos
de COVID-19 de las últimas semanas, todo se podría retrasar, al menos, 15 días.
De confirmarse esto, los planteles que no disputen torneos internacionales,
cumplirán 7 meses sin competencia oficial. Éste semana será clave, la reanudación
de la Copa será un espejo de lo que vendrá en el fútbol argentino. Si todo sale
bien, incluido los viajes de los equipos al exterior, se podría dar el visto
bueno para la fecha programada. De lo contrario, todo tendrá que seguir
esperando. Los protocolos de entrenamientos se vienen cumpliendo bien, sólo
Boca Juniors tuvo contagios masivos, el resto fue solucionando los conflictos
del virus. Banfield ha tenido pocos positivos y aquellos que contrajeron el
virus, fueron aislados y sus casos fueron seguidos de cerca de manera
responsable y correcta. Lo que sí está claro, es que el hincha deberá esperar,
posiblemente hasta el año que viene, para poder asistir al Lencho a ver un
partido oficial.