sábado, 22 de abril de 2017 - 18:53

Buena victoria en casa por 2 a 0 para seguir hundiendo al Cervecero

Por Guido Cichello. Si bien el equipo no jugó un buen partido, terminó ganando por 2 a 0 apoyándose en el buen nivel individual de sus referentes, Nicolás Bertolo y Darío Cvitanich. Quilmes terminó con 9 hombres y tuvo, con el partido 1 a 0 un penal a favor que terminó atajando Hilario, clave para la victoria del Taladro.

victoria ante quilmesA veces se juega bien y no se gana, como ante Boca, y otras se juega mal y se termina sumando de a tres. El fútbol tiene esa particularidad, y Banfield está sumergido en una irregularidad de su rendimiento, a esta altura, llamativa. No fue superior a su rival, que jugó todo el segundo tiempo con uno menos, pero ganó y eso en definitiva es lo más importante. El sueño de las Copas toma cada vez más color y el equipo va ganando confianza a raíz de los resultados, sobre todo de local. El primer tiempo no fue bueno, pero ambos generaron un par de situaciones claras como para romper el cero. Pero fue Bertolo, nuevamente ganando en el mano a mano que se tiró en el área para que Sarmiento, desde los once pasos, ponga el 1 a 0. El enganche volvió a besar el escudo, hecho llamativo ya que no surgió de las inferiores del club y no es hincha de Banfield, pero cumplió así con la ley del ex, anotándole a su ex club. A poco del final del primer tiempo Quilmes se quedaba con uno menos por la expulsión de Ramírez. Estaba todo servido para que en el complemento el Taladro lo liquide. Pero lejos de eso, sufrió más de la cuenta. No podía generar circuitos de fútbol y se contagiaba de las imprecisiones del rival. Y fue a los 63 minutos que Hilario Navarro atajó un penal, el cual de haberse convertido, hubiese cambiado la historia del juego. Pero con la ventaja el equipo tomó consciencia que no se le podía escapar el partido y logró ampliar el tanteador. En este caso fue Cvitanich que aprovechó un rebote, tras una definición de Sperdutti, para poner el definitivo 2 a 0 para Banfield. Poco le importa al fanático cómo juega el equipo, hoy no lo hizo bien, pero sumó de a tres y sigue soñando con volver al plano internacional.