Por Guido Cichello. Pudo haber sido derrota pero terminó siendo empate ante un Colón que manejó por momentos la pelota pero que no inquietó demasiado a Hilario. Se vieron algunos aspectos positivos en el juego, como la entrega y el compromiso, además del órden defensivo, algo que hacía tiempo no tenía. Igualmente, hay mucho por mejorar y corregir.

En la previa todos coincidían en que Colón era uno de los rivales más incómodos para enfrentar justamente en el debut de Falcioni al frente del primer equipo. Y si bien no se notó mucho la diferencia de los meses que llevan trabajando uno y otro entrenador con sus equipos, por momentos Colón dominó las acciones aunque sin tanta profundidad. Por su parte el Taladro mostró pinceladas de buen fútbol con Erviti y Colela, además del siempre voluntarioso Silva. Defensivamente Hilario, Matheu y Pérez se sintieron a gusto con el nuevo sistema táctico que los encuentra con mayor respaldo de los volantes. El arranque del juego tuvo a un Colón dominador pero sin demasiado peligro. Fueron corriendo los minutos y Banfield emparejó, pero cuando todo se iba encarrilando Ledesma sacó un gol de otro partido para poner 1 a 0 a su equipo. El golpe fue duro y difícil de asimilar, pero la respuesta llegó en el momento justo. Matheu se quedó de nueve tras una pelota parada y tras centro de Silva ponía de cabeza todo como al comienzo. Banfield se iba al descanso con el sabor de que podía revertir la historia. Pero en el segundo tiempo ambos equipos mermaron su rendimiento. Quizás producto del cansancio o de cuidar demasiado el arco propio. Pero no hubo casi situaciones de gol. Colón de contragolpe lo pudo haber ganado y Banfield de un balón detenido también. Fue empate en 1 a 1, hay mucho por corregir, pero con Falcioni en el banco, todo se hace más sencillo. El hincha lo ama y eso ayudará a mejorar semana a semana.