Marcelo Nildo Quinteros fue una pieza clave del equipo de Julio César Falcioni que se consagró campeón en el Apertura 2009. Los buenos rendimientos, el cariño hacia la institución y la actitud que demostró a lo largo de estas últimas dos temporadas quedará pasa siempre en la memoria del hincha de Banfield, que en su regreso al Florencio Sola lo recibió con un cálido aplauso y tuvo su merecido reconocimiento por parte de la Comisión Directiva, que le entregó una plaqueta conmemorativa.

Desde que arribó el micro de Boca Unidos de Corrientes al estadio hasta que se retiró, la gente del Taladro fue muy afectuosa con el ex Rosario Central y Gimnasia de Jujuy, que se mostró muy agradecido y conmovido por esta muestra de cariño que recibió. Cuando se arrimó a la mitad de la cancha para recibir su obsequio, desde los cuatro costados del estadio fue aplaudido y ovacionado. Quinteros llegó en junio de 2009 tras su paso por el Lobo jujeño y se transformó en un jugador fundamental en el esquema del Emperador. Entre el 2009 y 2012 disputó 98 partidos por torneo local, 8 por Copa Libertadores y 4 por Copa Sudamericana. En total fueron 110 partidos oficiales con la camiseta albiverde entre campeonato argentino y torneos internacionales, con 5 goles convertidos. Su último partido con esta camiseta fue contra Colón de Santa Fe, aquel fatídico día que Banfield perdió la categoría. Sin dudas que el hincha de Banfield no se olvidará nunca de Marcelo Quinteros y él tampoco podrá olvidar todo lo que vivió en esta institución y siempre lo llevará en su memoria, en su piel ya que tiene tatuado un taladro en su brazo derecho que significó una promesa por haber conseguido la primera estrella del club.